Son varios los factores que entrega el estudio de las ciencias a los escolares. La experimentación e investigación de ella como forma de aprendizaje puede ser relevante para el desarrollo de capacidades futuras.
Los niños son curiosos por naturaleza. La formación científica alimenta esa curiosidad y aporta a los alumnos una serie de conceptos, aptitudes para la vida y opciones de futuro profesional que les serán de gran valor. Las ciencias pueden aportar a los niños una mejor comprensión del mundo que les rodea, a desarrollar importantes habilidades para la resolución de problemas y experimentar en las técnicas de investigación. Este es uno de los conceptos de educación adoptados por el Colegio Almenar con su ya instaurada Feria de Ciencias.
Sobre la manera de ayudar a los niños a comprender y valorar el mundo a través de la ciencia, las técnicas de investigación y experimentación, Portal Pirque conversó con Jorge Zuñiga, jefe del departamento de Ciencias del Colegio Almenar y con el profesor de Ciencias del Almenar de Pirque, Paolo Cevo.
¿De qué manera la ciencia ayuda a los niños a comprender y valorar el mundo que los rodea?
Existen muchas formas de ayudar a los estudiantes a comprender el mundo que los rodea, desde la ciencia, lo primero es que el niño se maraville con lo que ve y observa. Por medio de la indagación y experimentación se pretende que el estudiante refuerce los conocimientos teóricos aprendidos en el aula y empíricos obtenidos de su experiencia.
Por medio de la investigación se pretende que el joven internalice un conocimiento más profundo que es aprender a conocer el mundo a través del cuestionamiento, de la duda. Por muy simple y comprensible que parezca un sistema o realidad siempre será útil y pertinente identificar las fuerzas que lo sustentan y las variables que lo pueden modificar o destruir. Cuando pequeños y entramos en contacto con nuestros primeros juguetes intuitivamente nos preguntamos, ¿qué pasa si lo lanzamos a través de una pendiente o si le sacamos una rueda?, detrás de este cuestionamiento intuitivo se encuentra la base del método científico, es decir si modifico esta variable cómo se comporta esta otra variable. Es tarea de la ciencia en general y de los profesores de ciencias en particular, sistematizar este cuestionamiento intuitivo y utilizarlo como herramienta de conocimiento.
¿La ciencia favorece el aprendizaje de técnicas de trabajo, en cuanto a investigación y desarrollo experiencial, como causa efecto errores, etc?.
Por supuesto que la ciencia favorece el aprendizaje de técnicas de trabajo, ya que la ciencia no es solo observar, por medio de la aplicación de todos los pasos que involucra el método científico, el estudiante debe observar, inferir, desarrollar estrategias de trabajo para abordar la investigación de un tema, experimentar y luego llegar a formular hipótesis, validándola o rechazándola por medio de la experimentación, para luego dar a conocer sus resultados por distintos medios (informes, publicaciones, demostraciones, etc.). Todo este proceso lleva al estudiante a plantear y replantear cuestionamientos y soluciones sobre un problema o hipótesis particular, donde la identificación de la relación causa efecto es central en el aprendizaje.
Cualquiera tiene una buena idea, otra cosa es que a través del planteamiento de una hipótesis de trabajo y el eterno ejercicio del ensayo y el error el estudiante pueda elaborar un producto que pueda mostrar a la comunidad (curso, colegio, comuna, etc), ese logro es producto y evidencia de la debida apropiación de las técnicas de trabajo mencionadas en la pregunta
¿Al aportar una dosis de escepticismo, puede desarrollar aptitudes de pensamiento independiente?
Todo científico en ciernes, y el ámbito escolar no escapa a ello, es basalmente un escéptico, es decir una persona que no acepta la realidad del "porque si", por el contrario es un eterno cuestionador alguien capaz de decir "te creo, pero qué pasaría si hacemos esto o aquello". Es ahí donde nos hermanamos con el escéptico, es decir con el enemigo de las verdades absolutas y aparentemente incuestionables, en ese sentido los profesores de ciencias nos debemos acercar y acoger a los estudiantes que la pedagogía denomina de "pensamiento divergente"; son esas mentes inquietas e independientes las que tienen mayor potencial científico, el aprendizaje de las ciencias tiene mucho que ver con entrenar y fortalecer a ese escéptico que todos llevamos dentro. Explicándolo a través de un ejemplo sin temor a equivocarnos, podemos asegurar que sin la persistencia y trabajo de ciertos escépticos todavía estaríamos creyendo que el sol gira alrededor de la tierra y que ésta es el centro del universo, aunque deberíamos prestar atención a cualquiera que sea capaz de exponer un argumento o experimento que apoye ese aparente error.
¿Cómo aplica el colegio el desarrollo de la ciencia como modo de educación?
Nuestro colegio le da un gran énfasis a la ciencia, tener un grupo calificado de profesionales es una prioridad, entregar los recursos necesarios para el aprendizaje de los alumnos y un laboratorio de ciencias con todo el equipamiento necesario para que el alumno experimente son fundamentales para el desarrollo de un buen trabajo.
También dejamos libertad a la creatividad para que los estudiantes desarrollen sus habilidades científicas, lo cual se ve reflejado, por ejemplo, en una feria científica, sin embargo nuestro eje principal es la debida apropiación por parte de ellos del método científico. Será nuestra labor como docentes diseñar e implementar estrategias para guiarlos en la apertura de su entendimiento por medio de la exploración y la investigación.
¿Puede también aportar con cualidades comunicativas y favorecer la creatividad para traducirse en eficaces relaciones personales y aptitudes de presentación para los negocios?
Sin duda desde hace mucho tiempo las metas del trabajo científico están orientadas hacia un logro colectivo, lo que pasa es que persiste en la gente la imagen romántica del científico como un caballero medio loco medio volado y sobre todo muy solo, que en su laboratorio perdido en el subterráneo de alguna universidad o castillo hace descubrimientos que pueden salvar o destruir a la humanidad; por el contrario una investigación científica, y el ámbito escolar no escapa a ello, se desarrolla en grupos de trabajo, apuntando al trabajo en equipo, la designación de tareas y la comunicación de resultados a la comunidad, lo que conlleva necesariamente a que los jóvenes se desarrollen enfrentando a sus pares, exponiendo y discutiendo sus puntos de vista y sobre todo propiciando el debate. Estos ejercicios tienen, evidentemente, un valor intrínseco en el quehacer científico, pero indudablemente constituyen un gran entrenamiento a la hora de tolerar la frustración y el disenso, así como en la puesta en práctica y valoración del trabajo en equipo, la delegación de tareas y funciones, por mencionar algunas de las habilidades blandas más codiciadas en los ámbitos comercial, laboral y de las relaciones interpersonales, que en el caso de ser debidamente apropiadas permitirá a nuestros estudiantes enfrentarse al mundo con más seguridad.
